Introducción.
- Historia de la Filosofía en República Dominicana.
- orígenes ,evolución y actualidad de la filosofía dominicana.
- Aportes de Fernando Arturo de Meriño y Eugenio Maria de Hostos.
Introducción
La filosofía de la educación es una disciplina relativamente moderna que estudia el
fenómeno educativo y las teorías
sobre el mismo desde una perspectiva racional, con el deseo de ofrecer una
explicación ultimativa sobre la educación humana.
En lo que
respecta al quehacer filosófico dominicano, con la generación ochenta y las
sucesivas promociones de los noventa y principios de la presente centuria, se
ha alcanzado tal nivel de depuración, rigor y riqueza que este momento, visto
en su conjunto, difícilmente encuentra otro que lo supere o lo equipare en el
pasado. Desde siempre tuvimos grandes filósofos y pensadores, sin
lugar a dudas, pero nunca en semejante proporción.
La filosofía está en la base de todo el pensamiento
dominicano. Original o no, orgánico o sistemático (o no), cada texto discursivo
del área social o natural, contiene preguntas filosóficas.
Es necesario analizar, sin intenciones de
competencia, las ideas filosóficas de las personas dominicanas del pasado y de
hoy dedicadas a la filosofía, y evaluar si hay calidad en su abordaje, si
existen seguidores, sobrevivientes a sus inquietudes, contenidos de verdad,
configuración de sistema y originalidad en su ejercicio de racionalidad.
A continuación veremos más detalles acerca del
desarrollo y el estado actual de la filosofía en República Dominicana.
Historia de la Filosofía en República Dominicana
El curso de las ideas filosóficas en la República Dominicana, ha sido un poco heterogéneo, difuso y encubierto, en el marco de las reflexiones sociales, literarias, estéticas, antropológicas, históricas y sobre la naturaleza; maleza (de acuerdo con algunas personas), constituida en un impedimento para encontrar una reflexión filosófica nativa, propuesta en el lar nacional al estilo de la filosofía occidental. Quizás esta es una de las muchas razones por las cuales, a las personas que están dentro y fuera del campo de ejercicio de la filosofía, les ha costado o han decidido, sin que esté precedida de una exhaustiva investigación, dar una respuesta rápida al problema de si existe o no una filosofía dominicana, asumiendo abruptamente su no existencia.
Normalmente se consideran trabajos filosóficos, los referentes a los grandes problemas y preguntas de la antología, conceptualistas tendentes a la totalidad, que interrogan sobre el Ser, la libertad, la verdad, el origen, Dios, el alma, los valores; de modo que guiados por esta consideración, vinculada al filosofar puro, se ha decidido, a la ligera en muchos casos, apuntar que no existe una filosofía dominicana.